googlef87c5bb6a5dde55a.html content='pX8WnVSvXsrSCE6ThXyzIIPFKBjDfIQaaLIdDsNIBzY=' ADNpressOnline: 2017-02-05

domingo, 5 de febrero de 2017

BANNON: el poder en la sombra de la Casa Blanca



En el imaginario colectivo norteamericano, Stephen Bannon de 63 años, nacido en Virginia y con un máster en negocios en la Universidad de Harvard, es algo así como el oculto cerebro detrás de Donald Trump. Otros prefieren hablar de él como de la sombra que habla susurrando al oído del presidente como su estratega y hombre de confianza y el que le da voz a lo que piensa y ordena su agenda. En un editorial del "The New York Times" se hizo eco de su creciente poder y se lo llamó "Presidente Bannon" y por su parte la revista Times acaba de dedicarle su tapa de: "El gran manipulador". Se lo mira con recelo y a los 15 días que lleva en la Casa Blanca, éste publicista con lazos en Hollywood ascendió en la escala de influencia como ningún otro de los integrantes del equipo presidencial.
Llegó como estratega y asesor del presidente pero de la noche a la mañana Trump lo sentó en el Consejo de Seguridad Nacional, uno de los órganos más poderosos de la Casa Blanca y decisivo para cuestiones de seguridad interior y exterior, incluido para la estrategia contra el terrorismo.
Para muchos fue demasiado y hubo intensa crítica. "No entendemos qué hace allí", dijeron muchos republicanos. No hay antecedentes de civiles sin experiencia en inteligencia que integren éste cerrado círculo de decisiónes, salvo que se le pretendan computar los cuatro años que estuvo en el ejército. Demócrata por herencia y republicano por adopción llegó a la misma conclusión que Trump: que los dos partidos están corrompidos y que era necesario reconstruir "desde afuera", y desde afuera de todo incluida la prensa de la que suele decir que lo mejor que puede hacer es "callarse la boca", conocido de que tarde o temprano se convertirá en alguien que antepondrá sus propios intereses a los del votante.
Él no está aquí por dinero ni por influencia y no quiere ninguna de las dos cosas. Es un verdadero creyente, "un fanático". No habla mucho y le gusta el bajo perfil, se siente cómodo en la sombra.
Pero las expresiones que se le conocen son una radiografía de cómo intuyó el momento político para abrir paso al presidente. "La gente está enojada y está bien que lo esté porque la clase política la traicionó", dijo Bannon a la revista The Atlantic. En tanto él supo explotar ése malestar de los votantes y convertirlo en votos.


Bannon asumió la campaña de Trump en agosto pasado y la llevó adelante en el momento decisivo justo en que se colocó delante de Hillary Clinton en las encuestas, junto con la jefa de prensa Kellyane Conway que formaron un tándem imparable.
Tiene una comprensión muy clara de lo que piensan los norteamericanos y de por qué Trump podía ganar y es quién le transmite qué es lo que preocupa a los ciudadanos y por qué están enojados, explicó el ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani, otro integrante del cerrado círculo presidencial. En su hoja de ruta en la vida muestra que con apoyo de una buena fortuna, al pasar por las finanzas y trabajar en Goldman Sachs, para luego convirtirse en productor en Hollywood con uno de sus aciertos que fue la serie "Seinfeld", luego optó por los documentales y allí perfiló más su interés por la política al producir uno sobre Ronald Reagan, otro sobre Sarah Palin y un tercero sobre el movimiento ultraderechista Tea Party.
Bannon es visto así como el hombre que le asegura a Trump que "puede hacer todo lo que prometió en campaña sin mirar hacia los costados" y que, en éstos primeras semanas, lo está llevando a cometer costosos errores. "Trump confía en él", dicen los colaboradores del presidente. Uno de los más celosos por ésa nueva posición es Reince Priebus, el jefe de gabinete.
Una preferencia que se vé hasta en los detalles de su entorno, es que Bannon es el único que entra en el Salón Oval sin traje y corbata, más aún a diferencia del elenco del círculo íntimo hasta incorporó el "cuasi uniforme" presidencial de traje oscuro y corbata roja, con el que Bannon suele también pasearse en suéter o en saco sport.
Lo suyo dicen, es el bajo perfil y el privilegio de quedarse cuándo todos los demás se retiran,"porqué es el hombre en las sombras".